En los últimos tiempos se han extendido varios mitos en torno al zumo de naranja. Que si engorda, que si contiene demasiado azúcar o que no es tan sano como una naranja entera, pese a ser el líquido que estas contienen. Muchos de estos mitos solo esconden una cierta falta de conocimientos, pero también llegan al público verdades acerca de este líquido, las cuales merece la pena difundir todo lo posible.
En esta entrada vas a conocer los mitos más recurrentes y las verdades que se esconden tras ellos. Al final, sabrás de una vez por todas si este zumo es saludable o no. Así, no tendrás que dudar siempre que quieras disfrutarlo y ya no te volverán a engañar.
¿Es cierto que contiene más azúcar que las naranjas de zumo en sí?
En la actualidad, el azúcar se está empezando a convertir en el origen de todos los males. Es cierto que no es sano llevar una dieta con un alto contenido en dulces, pero no hay razón para alarmar tanto a la población. A este zumo se le ha acusado de contener demasiada azúcar, algo que los periódicos discuten de vez en cuando. Sin embargo, ¿es real que contiene tanto azúcar?
El zumo de una naranja contendrá exactamente la misma cantidad de azúcar que la fruta, salvo que alguien le añada más. Así, en el caso de un zumo recién exprimido no habrá problemas; sin embargo, la mayoría de zumos que se comercializan sí llevan azúcares añadidos, los cuales exceden en cantidad los de una naranja (8 gramos). Por tanto, un zumo recién exprimido y natural contiene azúcar, sí, pero solo el de la propia fruta.
¿El zumo de naranja engorda?
Además, un mito que deriva de este es que el zumo engorda. Para ganar peso a base de zumos que exprimes en casa tendrías que beber varios litros. La cantidad de azúcar que la OMS recomienda ingerir cada día es de menos de 25 gramos. De este modo, si una pieza de fruta entre 150 y 200 gramos y solo contiene 8 de azúcar, puedes entretenerte un rato haciendo los cálculos para averiguar cuánto zumo hay que tomar para llegar a los 25 gramos. Las naranjas no engordan 😉
¿Ayuda a que las caries aparezcan?
Este es otro mito que circula por las redes. Las caries son un problema muy común entre los niños, el cual deriva de ingerir mucho azúcar. Como ya sabes, el líquido obtenido de las naranjas de Valencia contiene muy poco azúcar. Sin embargo, sí que podría llegar a causarlas, pero tendrías que dejar a un lado tu higiene dental durante varios meses.
Hay varios factores que contribuyen a la aparición de caries en los dientes. El azúcar es, sin duda, uno de ellos, pero también lo es el pH de la boca, la frecuencia con la que te lavas los dientes o la exposición a elementos como los fluoruros. Así que este zumo contribuirá a que te salgan caries siempre y cuando no te laves los dientes. Esto se aplica a la fruta, ya que sigue conteniendo azúcares y ácidos.
¿La vitamina C se pierde?
Las naranjas para zumo contienen una buena cantidad de vitamina C, la cual pasa al líquido una vez exprimida la fruta. Sin embargo, en este punto existe la creencia de que la vitamina se esfuma. Una vez más hay algo de cierto en el mito. Todos los alimentos pierden sus nutrientes con el paso del tiempo, algo a lo que hacen referencia las fechas de caducidad y consumo preferente.
Al exprimir la naranja la vitamina C no se volatilizará al instante, pero sí que acabará haciéndolo pasado un tiempo. Diferentes estudios apuntan a que el zumo natural aguanta hasta 12 horas sin perder propiedades, siempre y cuando se conserve en la nevera.
En el caso de los zumos industriales, existe todo tipo de controles para evitar la pérdida de nutrientes. Así se mantienen unos niveles óptimos en toda la cadena de distribución. Sin embargo, hay que tener ciertas precauciones adicionales con el zumo exprimido en casa. Para empezar, procura beber lo que vayas a extraer, ya que cogerá amargor con el tiempo y podrían asentarse en él bacterias nocivas.
Además, para conservarlo debes mantenerlo fresco, aunque es muy recomendable consumirlo en el acto. Tampoco lo hiervas, ya que es a más de 100ºC cuando los nutrientes empiezan a perderse por culpa del calor extremo. Una vez más, un mito repleto de medias verdades.
¿Las personas diabéticas pueden beber zumo de naranja?
La respuesta corta es un sí. El azúcar no va a ser un problema en este caso, ni tampoco la fibra que contiene una naranja o la vitamina C. Estos nutrientes ayudan a mantener controlada la diabetes. Así, el zumo no tendrá efecto alguno, salvo que se beban ingentes cantidades del mismo, algo que no hacen ni los mayores entusiastas de las naranjas.
¿La leche en combinación con la naranja causa problemas?
A priori no. La razón de que exista este mito reside en la química. Mezclar el líquido de una naranja con un lácteo puede llegar a cortarlo. Esto es producto de la diferencia resultante entre el pH de ambas bebidas. Así, la acidez propia de una naranja sería suficiente para cortar la leche; sin embargo, al beberlas a la vez la leche no se corta hasta llegar al estómago, lo que es provocado por el ácido clorhídrico que genera este órgano para descomponer los alimentos.
Lo que no debes hacer es beber leche cortada, no importa qué sea lo que cause este fenómeno. De beberla acabarás con diarrea y el sabor agrio de la leche puede que no te guste. No obstante, en algunos países, como en Mongolia, se bebe leche agria sin que cause ningún problema.
Reflexiones finales; y disfruta de las naranjas de Valencia
El zumo de naranja está rodeado por diversos mitos y medias verdades. Ahora ya conoces lo que se esconde detrás de algunos, por lo que no dudes en disfrutar tranquilamente de esta bebida y de las naranjas en sí. De no hacerlo te estarás perdiendo todos sus nutrientes y beneficios, los cuales no son un mito.
Las naranjas de zumo de Valencia siempre han sido parte imprescindible del desayuno mediterráneo. Esto ha provocado que hayan surgido diferentes mitos sobre ellas, y que muchos hayan terminado tomándose por verdaderos.
El más clásico es el de que las vitaminas se le escapan al zumo si este no queda tapado o se bebe rápido. ¿Es esto cierto? Sigue leyendo, porque te vamos a desvelar de una vez por todas las respuestas a todos estos enigmas.
Algunos mitos sobre el zumo de naranja
Estas serían algunas de las leyendas más conocidas de las naranjas para zumo:
1. Tienen una gran cantidad de azúcar
Se ha hablado mucho sobre la gran proporción de azúcar que está concentrada en las naranjas de zumo.
Algunos nutricionistas han alertado acerca del peligro que pudiera tener consumir esta bebida en los desayunos o, incluso, en cualquier momento del día.
Pero en realidad lo que sucede es lo siguiente. La naranja es una fruta muy dulce y que, por lo tanto, tiene una gran proporción de azúcar, así como de fibra.
Generalmente, su líquido (el que se utiliza para el zumo) es el que posee todo el azúcar, mientras que la carne (que, por lo tanto, queda sin exprimir y sin consumir) es la que contiene una mayor proporción de fibra.
Aunque esto posee algo de verdad, realmente no es así del todo. El truco, en parte, estaría en mantener la pulpa del zumo ya que esta sí que posee una gran proporción de fibra. En cuanto al azúcar, todo dependerá más bien de cómo de equilibrada sea tu dieta.
En los últimos años se ha alertado mucho sobre los peligros que puede entrañar un consumo excesivo de azúcar. Pero la proporción que vas a encontrar en un zumo es mucho menor que la que vas a consumir en, por ejemplo, unas onzas de chocolate procesado. Por otro lado, no es lo mismo consumir azúcares naturales que azúcares procesados o refinados.
Por lo tanto, si vas a desayunar bollería o cereales azucarados y un tazón de café con azúcar junto con un zumo, puede que termines desarrollando un problema relacionado con la insulina. Pero si combinas el zumo de naranja natural con una dieta mediterránea y perfectamente saludable, en ese caso no vas a tener ningún problema.
Por lo tanto, no es malo consumir zumo de naranja a causa de su azúcar. Eso sí, mucho mejor hacerlo por la mañana que cuando se acerca la noche.
2. ¡Las vitaminas se van volando!
Otra frase muy reconocible y asociada con el zumo de naranja es la de “tómatelo ya, que pierde las vitaminas”. Y es que siempre se ha pensado que tenía que consumirse cuando estuviese recién exprimido.
Pero esto, en realidad, es otro falso mito más en el que se confunde el sabor con las propiedades.
Si dejas el zumo sin consumir, puedes ver que la pulpa y el líquido se separan, sedimentándose de este modo en dos partes diferenciadas.
También sucede que pierde frescor y que se vuelve bastante más amargo. Es decir que, si hablamos de calidad, es indudable que sufre un deterioro, y probablemente no lo disfrutes tanto si no lo consumes al momento.
Pero las vitaminas son otra cosa. Prácticamente ningún alimento pierde sus propiedades por no ser consumido de forma instantánea, y algo similar sucede con el zumo.
De hecho, un vaso de dos naranjas contiene aproximadamente el 60 % de la cantidad de vitamina C que puedes necesitar en un día normal. Es decir: es un aporte muy importante para tu dieta y para tu salud.
Los estudios que se han realizado en laboratorios en más de una ocasión revelan lo mismo: un zumo que se deja cerca de 12 horas destapado y en el exterior mantiene intacta esa proporción de vitamina C.
Es decir, la pérdida de vitaminas se trata sencillamente de un mito que tiene su origen en un problema con el sabor del zumo, pero no con sus propiedades ni su composición.
Por lo tanto, puedes consumirlo en cualquier momento con independencia de que esté recién exprimido o de que se haya elaborado hace un par de horas.
Eso sí, para mejorar un poco el sabor y evitar ese amargor que se suele producir, lo más recomendable es removerlo o agitarlo, para que recupere así parte de su consistencia. Y, si es posible, que lo mantengas en una nevera fría.
3. Las naranjas para zumo engordan
Este se trata de un rumor que se extendió mucho dentro de la comunidad fitness y del mundo del deporte y de la salud.
Precisamente a partir de la fobia o de la aversión generalizada hacia al azúcar, se ha confundido algo fundamental: los azúcares naturales con el azúcar refinado.
Las naranjas, por ejemplo, están cargadas de azúcares naturales, de fructosa. Y tu cuerpo, por motivos biológicos y nutricionales, necesita este tipo de nutrientes a diario para mantenerse sano y en buen estado. Se trata, por ello, de una necesidad que no se puede obviar.
En este sentido, las naranjas tendrían azúcares saludables o azúcares buenos, por lo que su consumo es muy recomendable. En cuanto a lo de que el zumo engorda, podemos remitirnos, nuevamente, al tipo de alimentación que se está siguiendo.
Piensa que, en sí, ningún alimento aislado engorda ni adelgaza. Depende siempre de la dieta que sigas, de la actividad que tengas y de las cantidades que consumas.
Por lo tanto, puedes integrar las naranjas dentro de tu dieta sin que estas supongan ningún tipo de alteración notable en tu peso. Sencillamente se trata de otra forma de consumir fruta que te ofrece, también, otras propiedades. Pero en ningún caso puede suponer un riesgo ni para tu peso ni para tu salud.
En conclusión, las naranjas de zumo de Valencia te ofrecen muchos nutrientes y puedes consumirlas en cualquier momento. Aparte, tienen azúcares buenos y te ayudan a llevar una dieta equilibrada.
Además, te ofrecemos facilidades a la hora de comprar naranjas de zumo, para que solo tengas que preocuparte de disfrutar en condiciones y cuando tú quieras de esta deliciosa pieza de fruta.